Maranta arundinacea Plum. ex L., Sp. Pl. 2. 1753;
M. sylvatica Roscoe ex Sm.
Plantas 0.31.3 m de alto, tallos frecuentemente ramificados en su parte superior, generalmente muriendo hasta quedar solamente el rizoma durante la estación seca, rizomas gruesos, tuberosos. Hojas basales 48 y caulinares 18, láminas ovadas, 3.535 cm de largo y 311 cm de ancho, hojas basales más largas, escasa y menudamente pilosas, ocasionalmente subglabras en la haz, glabras a menudamente pilosas en el envés; pulvínulo 0.21.8 cm de largo, menudamente tomentoso adaxialmente, el resto glabro u ocasionalmente subglabro, pecíolo ausente o raramente hasta 7 cm de largo en las hojas caulinares, 3.520 cm de largo en las basales, vaina auriculada, densamente pilosa en el ápice y en los márgenes, hasta subglabra. Inflorescencias frecuentemente varias por brote, brácteas 1 ó 2 (3), 2.46 cm de largo, cada una abrazando 2 ó 3 (4) pares de flores, pedicelo común a cada par de flores 2.35.2 cm de largo, flores abriéndose temprano por la mañana, mayormente autógamas; sépalos 1217 mm de largo; corola y estaminodios blancos, tubo de la corola encorvado, 1214 mm de largo; ovario densamente pubescente, o raramente glabro o subglabro, café-amarillento. Cápsula elipsoide, verde a matizada de café-rojizo.
Común, en bosques deciduos a perennifolios y bosques de galería, frecuentemente en sitios alterados y soleados, en las zonas norcentral y pacífica; 51000 m; fl y fr maynov, generalmente decidua durante la estación seca; Moreno 11827, Stevens 14689; México a Brasil y Ecuador, también en las Antillas. La pubescencia es variable en el ovario, la lámina de las hojas y la vaina. Las poblaciones de los lugares más secos del Pacífico son densamente pubescentes mientras que las de lugares más altos como Boaco y Nueva Segovia son casi glabras. Ejemplares de herbario de M. arundinacea pueden ser confundidos con M. gibba, sin embargo M. gibba tiene la haz de la hoja glabra, los tricomas de la parte inferior del pulvínulo se continúan hasta la base del nervio principal del envés, y en Nicaragua tiene una distribución restringida a la zona atlántica.