Ficus zarzalensis Standl., Publ. Field Mus. Nat. Hist., Bot. Ser. 22: 16. 1940.
Árbol, 25–55 m, regularmente epífito. Estípulas 0.6–1.3 × 0.3–0.6 cm, pubescentes con tricomas amarillo dorado. Hojas con la lámina 5–16 × 3.5–8.5 cm, elíptica u oblonga a ovada u obovada, glabra y ± densamente pustulada en ambas caras, con 5–9 nervios secundarios por lado. Higos pareados, 0.9–1.5 cm de diám., muy diminutamente puberulentos, subsésiles o con pedúnculo hasta ca. 0.2 cm; brácteas 2, ca. 0.2 × 0.4 cm; ostíolo plano o elevado (hasta ca. 0.1 cm).
Bosque muy húmedo, 0–50+ m; S vert. Pac., Pen. de Osa. Fr. ene.–abr., jun., oct. CR–Col., Perú. (Hammel 18447, CR)
Se reconoce por su hábito estrangulador, con el tronco compuesto por muchas raíces aéreas, sus estípulas a menudo persistentes (que se mantienen arrolladas) y su distribución limitada. Es similar a Ficus hartwegii, pero la última generalmente posee láminas foliares pubescentes con tricomas largos sobre el nervio medio en el envés y tiene un hábitat más montano, aparte de que no desarrolla las impresionantes y colgantes raíces típicas de F. zarzalensis.