Pilea beguinotii Cufod., Arch. Bot. Sist. 10: 29. 1934.
Hierba, hasta al menos 0.6 m, erecta, terrestre(?), monoica; tallitos glabrados; estípulas ca. 0.2 cm, angostamente ovado-lanceoladas, de otra forma desconocidas. Hojas del mismo nudo subiguales, con una relación en tamaño desconocida; pecíolo ca. 2–4 cm, los del mismo nudo subiguales; lámina hasta ca. 14 × 6 cm, elíptico-lanceolada, oblicuamente atenuada y decurrente en la base, largamente falcado-acuminada en el ápice, crenado-serrada distalmente, glabrada en ambas caras, con cistolitos lineares, sin orientación definida, inconspicuos, o (a menudo) ausentes, con glándulas rojizas desconocidas, subplinervada. Infls. en nudos con hojas, con pedúnculo de longitud desconocida, unisexuales, cimosas, 2–4 cm. Fls. estaminadas con tépalos de número desconocido, ca. 1 mm, con apéndices subapicales muy cortos. Fls. pistiladas con el tépalo más largo de longitud desconocida; estigma desconocido. Frs. ca. 1 mm, de forma desconocida y subasimétricos, puncticulado-granulosos.
Bosque pluvial, ca. 2300 m; vert. Pac. Cord. Central (Guayabillos). Fl. may. ENDÉMICA. (Cufodontis 351, W)
Pilea beguinotii se reconoce por ser una hierba terrestre con estípulas diminutas, las hojas del mismo nudo subiguales, con el pecíolo largo y la lámina dentada y subplinervada, e infls. cimosas, pequeñas, y por presentar una distribución muy localizada. Comparar con P. glabra, P. pallida y P. pittieri.
Esta es una entidad muy pobremente entendida, conocida con certeza solo por el tipo perdido, ni siquiera con una imagen disponible. Es bien factible que resulte coespecífica con otra sp. tratada en esta obra (ver, p.ej., la discusión de P. auriculata). Standley 38819 (US; Las Nubes de Coronado), una segunda muestra costarricense incluida en P. beguinotii por Burger (1977), se encuentra identificada como P. glabra en Monro (2001).