Onoseris Willd.
Caloseris Benth.,
Centroclinium D. Don, Chaetachlaena D. Don, Chucoa Cabrera, Cladoseris (Less.) Less. ex Spach,
Cursonia Nutt., Hipposeris Cass., Isotypus Kunth,
Onoseris Willd.
sect. Cladoseris Less., O. subg. Cladoseris (Less.) Less.,
O. sect. Hipposeris (Cass.) Less., O. subg. Hipposeris (Cass.) Less., Pereziopsis J.M. Coult., Rhodoseris Turcz.,
Schaetzellia Klotzch,
Seris Willd.
Por J.F. Pruski.
Hierbas anuales o
perennes vistosas a arbolitos o bejucos, monoicos; tallos con hojas en su
mayoría basales hasta la mitad del tallo, en Mesoamérica con tallo y nunca arrosetadas, erectos a trepadores o rastreros, simples debajo
de la capitulescencia (Mesoamérica) a ramificados, sin
alas, lanosos o tomentosos; follaje con tricomas
simples y algunas veces también heterótricos con tricomas alargados patentes estipitado-glandulares
(especialmente en hábitats secos). Hojas simples o pinnatipartidas
(frecuentemente descritas como simples con el pecíolo lobulado), radicales o
alternas, sésiles o largamente pecioladas (en Mesoamérica la base peciolariforme de más de 4 cm); láminas lineares a hastadas, ovadas u obovadas, cuando pinnatilobadas
típicamente con un lobo terminal muy grande (similar a la lámina de las hojas simples)
y algunos lobos proximales más pequeños por lado disminuyendo de tamaño proximalmente,
palmatinervias o cuando pinnatilobadas al menos el lobo
terminal palmatinervio y los lobos proximales pinnatinervios
(Mesoamérica) o en Sudamérica la nervadura pinnada y las hojas no lobadas, las superficies
generalmente bicolores, la superficie adaxial por lo
general laxamente araneosa a glabrescente,
ocasionalmente araneoso-lanuginosa, la superficie abaxial araneosa a lanosa o
tomentosa, los márgenes irregularmente sinuado-dentados
(Mesoamérica) a enteros; pecíolo o la base peciolariforme
(frecuentemente descrita como pecíolo lobulado), frecuentemente alado, las
especies pinnatilobadas frecuentemente graduando a la
lámina de la hoja. Capitulescencia terminal, no
foliosa, corimbosa o paniculada (Mesoamérica) a monocéfala (algunas veces escapífera);
pedúnculos en su mayoría bracteolados distalmente. Cabezuelas
homógamas, bilabiado-tubulares (frecuentemente descritas
como discoides) a más generalmente heterógamas (largamente
bilabiadas y subactinomorfas o largamente bilabiadas
y tubulares y bilabiadas); involucro turbinado a campanulado
o hemisférico; filarios uniformemente graduados, 4-12-seriados,
frecuentemente patentes lateralmente a reflexos luego
de la fructificación, linear-lanceolados o lanceolados (Mesoamérica) a elíptico-lanceolados
o algunas veces ovados, frecuentemente purpúreos en parte, el ápice
angostamente agudo o atenuado (Mesoamérica) a largamente atenuado; clinanto aplanado, sin páleas, glabro o fimbriado
a setoso o piloso. Flores homógamas
a más generalmente heterógamas; corolas generalmente dimorfas, largamente
bilabiadas, tubular-bilabiadas, y/o subactinomorfas, las
corolas marginales en su mayoría rojo-rosadas, rojizas o purpúreas, las centrales
rosadas o generalmente amarillentas. Flores marginales (generalmente presentes)
1-seriadas, pistiladas pero frecuentemente con
estaminodios bien desarrollados y frecuentemente con apariencia bisexual;
corola largamente bilabiada (3+1), el labio externo alargado y frecuentemente exerto del involucro, abaxialmente
subglabro a araneoso-peloso,
el ápice 3-denticulado, el labio interno linear, bífido o entero; estilo
generalmente bien exerto entre los estaminodios. Flores
centrales bisexuales; corola subactinomorfa (0+5) o
tubular-bilabiada (3+2 o 1+4), el tubo frecuentemente ruguloso-estriado,
la garganta angosta, los lobos subiguales o
desiguales, cuando tubular y bilabiada generalmente con 3 o 4 lobos subiguales abaxiales y 2 o 1 lobos
adaxiales (internos) obviamente más largos (más
profundamente incisos) que los lobos abaxiales, erectos
o recurvados; filamentos de las anteras papilosos en especial proximalmente, las
tecas largamente caudadas, las colas lisas o papilosas, el apéndice apical
alargado, agudo; estilo con un nudo basal bulboso conspicuo, las ramas
anchamente oblongas pero de apariencia cortamente ovada, proximalmente
conniventes la mayor parte de su longitud, generalmente papilosas abaxialmente o algunas veces lisas, el ápice obtuso. Cipselas cilíndricas a subfusiformes,
sin rostro pero algunas veces angostadas apicalmente, parduscas, 4-6-acostilladas,
glabras o pelosas, los tricomas gemelos alargados,
delgados, finos, de punta aguda; carpóforo bulboso,
pajizo; vilano de numerosas cerdas capilares escábridas, las cerdas subiguales y típicamente isomorfas, ocasionalmente algunas
con la punta claviforme. x = 9. Aprox. 33 spp. América
tropical, cerca de la mitad de las especies endémicas de Perú.
Onoseris fue
revisado por Ferreyra (1944) quien
reconoció 25 especies. Sancho (2004) trató
las cuatro especies mesoamericanas como miembros de O. subg.
Onoseris, debido
a los tallos simples (por debajo de la capitulescencia),
las capitulescencias corimbiformes
a paniculadas y las hojas anchas típicamente lirado-pinnatífidas con un lobo
terminal palmatilobado. Onoseris subg. Hipposeris es estrictamente sudamericano y se
compone de especies con las hojas estrechas y simples y las nervaduras pinnadas.
Los sinónimos genéricos Isotypus, Caloseris, Rhodoseris, Schaetzellia y Seris están tipificados
por la especie mesoamericana O. onoseroides (o uno de sus sinónimos taxonómicos) y el sinónimo Pereziopsis está
tipificado por el basiónimo de la especie
mesoamericana O. donnell-smithii .
Onoseris costaricensis, O. donnell-smithii y O. onoseroides son las únicas
especies de Onoseris con cabezuelas
tubular-bilabiadas sin limbos de la corola radiantes y solo con flores bisexuales,
homógamas e isomorfas. Estas tres especies se
consideran por lo tanto estrechamente emparentadas. Onoseris silvatica se parece más a las especies sudamericanas O. fraterna S.F. Blake y O. peruviana Ferreyra y, en la clave de especies de Ferreyra (1944), se
encuentra al lado de esas. Onoseris onoseroides y O. silvatica son las únicas especies del género que se encuentran
en Centroamérica y Sudamérica.
Aunque las
especies mesoamericanas suelen tener las hojas lirado-pinnatífidas (frecuentemente
descritas como simples con un pecíolo lobulado), individuos de cada especie en
ocasiones tienen algunas hojas no divididas. Las capitulescencias
de las especies mesoamericanas son muy grandes y a menudo cuentan por
aproximadamente 1/3 de la altura de toda la planta. Ferreyra (1944) midió las ramas del
estilo de las especies mesoamericanas como 3.5-5.5 mm, pero los c. 3/4 proximales
de las ramas son típicamente conniventes. Aquí se da la longitud de los ápices
libres de las ramas del estilo como 0.5-1 mm.
Bibliografía:
Ferreyra, R. J. Arnold Arbor. 25: 349-395
(1944). Greenman, J.M. Proc. Amer.
Acad. Arts 41:
235-270 (1906 [1905]). Sancho, G.
Syst. Bot. 29: 432-447
(2004).