Kerry A. Barringer y Lorin I. Nevling

Arboles o arbustos venenosos, corteza con fibras fuertes y enredadas; plantas hermafroditas, dioicas o monoicas. Hojas alternas o irregularmente verticiladas, simples, enteras, pinnatinervias, pecioladas o sésiles; estípulas ausentes. Inflorescencias terminales o axilares, racemosas o umbeliformes, pedunculadas; flores regulares o ligeramente irregulares, 4-meras, períginas; hipanto tubular a campanulado, bien desarrollado, frecuentemente coloreado; sépalos imbricados o raramente valvados o libres, petaloides; pétalos pequeños, frecuentemente formando un anillo faucial; estambres usualmente diplostémonos, reducidos o ausentes en las flores pistiladas, los filamentos exertos, cortos o ausentes; disco usualmente presente, anular o cupuliforme, usualmente rodeando al gineceo; ovario 1-carpelar, 1-locular, reducido a un pistilodio en las flores estaminadas, estilo alargado, delgado, el estigma capitado, óvulo 1, péndulo, anátropo, bitégmico, placentación parietal. Fruto indehiscente, drupáceo; semillas a veces ariladas.

Familia con 55 géneros y ca 500 especies, ampliamente distribuidas en las regiones tropicales y templadas, pero individualmente nunca siendo parte conspicua de la vegetación; 1 género (Daphnopsis) con 2 especies se encuentran en Nicaragua. Otro género, Schoenobiblus, se encuentra desde Costa Rica hacia el sur; se distingue fácilmente por tener 4 estambres largamente exertos y los lobos del cáliz libres.

Fl. Guat. 24(7): 234–239. 1962; Fl. Pan. 45: 93–97. 1958.