Chionolaena lavandulifolia (Kunth) Benth. et Hook. f. ex B.D. Jacks., Index Kew. 1: 516 (1893). Helichrysum lavandulifolium Kunth in Humb., Bonpl. et Kunth, Nov.
Gen. Sp. folio ed. 4: 68 (1820 [1818]). Holotipo: México,
Veracruz, Humboldt y Bonpland s.n. (P-Bonpl.).
Ilustr.: Freire, Ann. Missouri Bot. Gard. 80: 426, t.
15 (1993).
Por S.E. Freire y J.F.
Pruski.
Chionolaena
costaricensis (G.L. Nesom) G.L. Nesom, C. lavandulaceum Benth.
et Hook. f. ex Hemsl., C.
macdonaldii (G.L. Nesom) G.L. Nesom, Gnaphaliothamnus costaricensis G.L.
Nesom, G. macdonaldii G.L.
Nesom, Gnaphalium lavandulaceum DC., G. lavandulifolium
(Kunth) S.F. Blake non Willd.
Subarbustos cespitosos a enanos, 10-35 cm; tallos densa
pero igualmente foliosos en la 1/2 distal, frecuentemente sin hojas
proximalmente. Hojas 4-12(-18) × 1.5-2.5 (-3.5) mm, linear-elípticas,
estipitado-glandulosas debajo del tomento en la superficie adaxial, la
superficie adaxial tomentosa, los márgenes revolutos. Cabezuelas subsésiles.
Involucro 5-9 mm, campanulado; filarios 24-44, los filarios externos ovados,
obtusos en el ápice, los internos linear-elípticos, con prominente lámina blanca. Flores marginales 5-24;
corola 3-4.5 mm. Flores del disco 3-18; corola 3-5 mm; ramas del estilo
truncadas a obtusas. Cipselas oblongas, glabras o subglabras; vilano de cerdas
subdimórficas o dimórficas, con células apicales agudas o subredondeadas hasta
claviformes (apenas o conspicuamente más ensanchadas en las flores del disco),
las cerdas ligeramente connatas en la base, separándose en grupos o
completamente libres, subenteras o ciliadas en la base. Floración ene.-abr.,
jul.-sep. Bosques de Pinus, lugares rocosos y arenosos, áreas abiertas,
páramos con Chusquea. G (Isbele y Hüber 1575, US); CR (Davidse 25035, US); P (Knapp y Monro 10045, MO).
3100-3800 m. (México [Veracruz], Mesoamérica.)
Chionolaena lavandulifolia presenta una gran variabilidad en lo que respecta al número de flores
por capítulo, al número de brácteas involucrales y a la pubescencia de las
cipselas. Esto ha dado lugar a que se describan otras dos especies, C. costaricencis y C. macdonaldii. Nesom
(1990)
diferencia C. costaricencis de C. lavandulifolia por
tener la primera de ellas, 5-10 flores pistiladas (vs. 21-24), 24-28 brácteas
(vs. 34-56) y las cipselas glabras (vs. subglabras). Sin embargo, se ha podido
observar ejemplares de C.
lavandulifolia con cipselas glabras con un mayor número de
flores pistiladas (17-24) y de brácteas (44). Mientras que para la segunda
especie, C. macdonaldii (de la cual solo se
conoce hasta el momento el ejemplar tipo) Nesom
(1990) indica
para los caracteres antes mencionados, valores intermedios entre C. costaricencis y C. lavandulifolia. Sobre la base del
material examinado y los tipos estudiados, no se ha hallado caracteres que
permitan diferenciar con claridad estas especies, por lo que se considera que
solo existe una especie de este grupo, que debe llamarse C. lavandulifolia.