Dioscorea racemosa (Klotzsch) Mottet, Dict. Prat. Hort. 2: 217. 1893-1894. Helmia racemosa Klotzsch, Allg. Gartenzeitung 19: 393. 1851; D. borealis C. V. Morton.
Tallos dextrovolubles, cilíndricos. Hojas alternas, 6.5–15(–21) × 3.5–9(–14) cm, ovadas a suborbiculares, 7–11-nervadas, glabras pero normalmente con pequeñas puntas glandulares dispersas sobre el envés, exestipuladas. Infl. masculina 9–32 cm, racimos de cimas o a veces racimos simples, el raquis verruculoso. Fls. estaminadas (1)2 ó 3 por cima, pediceladas, moradas o (menos frecuente) verduscas; tépalos separados; estambres 3, unidos en una columna ca. 0.2 mm, insertados en el centro de un toro circular o hexagonal, las células de la antera coherentes; estaminodios ausentes; pistilodio ausente; fls. pistiladas sin estaminodios; estilos simples. Frs. 0.4–0.7 cm de ancho, oblongo-lanceolados a elípticos; semillas aladas en la parte posterior.
Bosque muy húmedo, pluvial, nuboso y de roble, bordes y matorrales, 200–3100 m; vert. Carib. y cerca de la División Continental, Cords. de Guanacaste, de Tilarán y Central, ambas verts. Cord. de Talamanca, vert. Pac., Cerros de Escazú, Cerro Turrubares, región de Puriscal (Z.P. La Cangreja), Valle de General, Pen. de Osa. Fl. mar.–dic. CR y Pan. (Herrera 3469, CR)
Esta sp. común se distingue por las infls. racemoides con fls. pediceladas (típicamente en grupos cimosos) y estambres casi sésiles, con los filamentos típicamente unidos en una columna muy corta. En cuanto a la forma de la infl. y las hojas, es muy variable. Está estrechamente aliada a D. lepida, D. natalia y D. standleyi.