Myrcia fallax (Rich.) DC., Prodr. 3: 244. 1828. Eugenia fallax Rich., Actes Soc. Hist. Nat. Paris 1: 110. 1792.
Arbusto o árbol, hasta ca. 12 m, con tricomas amarillentos a blanco amarillento. Hojas con el pecíolo 0.5–0.7 cm, glabro; lámina 5–13 × 2–5 cm, por lo general angostamente elíptica u ovada a lanceolada, usualmente cuneada y a menudo decurrente en la base, acuminada en el ápice, coriácea, pubérula a glabra en el haz, adpreso-pubescente a glabra en el envés, con 15–20 nervios secundarios por lado, ligeramente levantados en ambas caras. Infls. axilares o subterminales, ca. 11 cm. Fls. con las bractéolas ca. 1 mm, lanceoladas; disco ca. 2 mm, hirsuto; sépalos ca. 1–2 mm, ovados, obtusos en el ápice; pétalos 2–3 mm, seríceos por dentro; estambres 4–5 mm; estilo 4–5 mm, pubescente en la base. Frs. ca. 1 cm, elipsoides, pubérulos, luego glabrescentes; semillas ca. 8 mm.
Bosque muy húmedo y pluvial, bosques degradados y parches de bosque a las orillas de caminos, 0–1700 m; vert. Carib. Cord. Central (Volcán Turrialba), S vert. Pac., Pen. de Osa. Fl. jun. S Méx. (Chis.) y Bel., Hond., CR–Bol. y Ven., Trin. & Tob., Guayanas, Bras., Antillas. (Harmon 309, CR)
Myrcia fallax está muy cercanamente relacionada con (y quizás mejor incluida en) M. splendens. Ambas pertenecen a un complejo de spp. que tienden a ser colonizadoras de bosques secundarios, comúnmente en áreas perturbadas a lo largo de caminos. Estas dos spp. están tradicionalmente separadas por caracteres quizás triviales (ver clave, copla 7) que no parecen servir en numerosos especímenes, razón de que las distribuciones y los caracteres morfológicos presentados en estas dos entradas son bastante tentativos.