Stemodia peduncularis Benth., en A. DC., Prodr. 10: 382. 1846.
Planta 0.2–1.1 m, rastrera a erecta o subescandente. Hojas con pecíolo 1–1.5 cm; lámina (0.8–)3–6 × (0.6–)1.5–4 cm, ampliamente ovada, truncada a cuneada en la base, redondeada a (más frecuente) aguda en el ápice, crenulado-dentada, esparcidamente puberulenta (esp. sobre los nervios) en ambas caras, notoriamente glandular-punteada. Infls. de 2–4 fls. Fls. con pedicelo 6–18 mm, ebracteolado; sépalos 4–7 mm, subiguales; corola blanca (con marcas rosadas a moradas), 11–15 mm; anteras con el conectivo ovoide. Frs. 0.6–0.7 cm, ampliamente ovoides.
Bosque muy húmedo, pluvial y nuboso, bordes de bosque y sitios perturbados, (250–)1000–2150 m; vert. Carib. y cerca de la División Continental, Cord. de Tilarán, ambas verts. Cord. Central, vert. Pac. Cords. de Guanacaste y de Talamanca, Cerros de Escazú, Cerros Turrubares y Caraigres, región de Turrubares (Cerro Rayos). Fl. ene., feb., abr., oct.–dic. S Méx.–Hond., CR y O Pan. (Prov. Chiriquí). (J. González & Zumbado 1513; CR, MO)
Stemodia peduncularis se reconoce por sus fls. pediceladas, así como las de S. angulata, pero más grandes (ver también la clave, copla 2).