Cyperus ligularis L., Syst. nat. ed. 10 867. 1759. Mariscus ligularis (L.) Urb.
Plantas perennes, cespitosas; culmos 30–100 cm, papilosos. Hojas 6–13, 30–100 cm; lámina 0.5–1.3(–2) cm de ancho, plegada, coriácea, glauca, con nervaduras transversales, escábrida. Infl. con brácteas foliiformes; rayos papilosos; espigas simples o digitadas, 1–3.5 × 0.8–1 cm, oblongas a subglobosas. Espiguillas numerosas, 3–7 × 1–2.5 mm, oblongo-elípticas, deciduas; raquilla alada; glumas ovadas, agudas, mucronadas, 9–11-nervadas, la línea media verde, los lados pardos a cobrizos. Fls. con 3 estambres. Aquenios 1.2–1.7 × 0.6–0.8 mm, obovoides a elipsoides, trígonos, apiculados, punticulados, pardo púrpura.
Bosque seco, húmedo, muy húmedo y pluvial, playas, manglares, bancos de ríos y sitios alterados cercanos a la costa, 0–150 m; vert. Carib. Llanuras de San Carlos y de Tortuguero, vecindad de Puerto Limón, Baja Talamanca, vert. Pac., llanuras de Guanacaste, Pen. de Nicoya, región de Golfo Dulce, Isla del Caño, Isla del Coco. Fl. ene., feb., abr.–oct. SE EUA, Méx.–Bol. y Ven., Bras., Jam., Bahamas, África, Oceanía. (Gómez-Laurito 10958, USJ)
Se distingue por sus culmos, hojas y rayos papilosos, y además por sus hojas y brácteas fuertemente escabrosas. También se destaca por sus hojas verde grisáceo, de potencial ornamental.