Coccoloba ascendens Duss ex Lindau, Bot. Jahrb. Syst. 13: 156. 1890. C. bejuco Poveda & P. E. Sánchez.
Liana, los tallos sólidos, glabros; ócreas 0.7–1.7 cm, glabras, deciduas. Hojas con el pecíolo que surge de la base de la ócrea, 0.4–1.5 cm; lámina rojiza al secar, brillante en ambas caras, 7.5–27.5 × 3.8–10.5 cm, obovada a oblongo-elíptica o angostamente elíptica, cuneada a obtusa y subauriculada en la base, acuminada en el ápice, cartácea, glabra, esparcidamente glandular-punteada en el envés, con 5–7 nervios secundarios por lado. Infls. con el pedúnculo 0.5–3 cm, racemosas (o a veces con 1 ramificación), 5–14 cm, el raquis (a veces engrosado en fr.) diminutamente puberulento; brácteas 1–1.5 mm. Fls. con pedicelo 1–2 mm (–4 mm en fr. y engrosado), igual o más corto que las ocréolas; perianto crema o blanco verdoso, 1.5–2 mm. Frs. morados, 15–17 mm, triquetros a ovoides, estrechos en el ápice y (a veces) acostillados, rodeados en su totalidad por el tubo del perianto, el angiocarpo lila rojizo a morado, 1.8–2.4 cm, ovaloide a subgloboso.
Bosque muy húmedo, bosques primarios, 0–350 m; S vert. Pac., P.N. Marino Ballena, región de Golfo Dulce. Fl. ene., mar.–may. CR–Col., Perú, Ven., Trin., Guayanas, Bras., Antillas Menores. (Aguilar 3463, CR)
Coccoloba ascendens se distingue por su hábito escandente y hojas con el pecíolo que surge de la base de la ócrea, articulado, y la lámina rojiza al secar y cartácea; además, son característicos el raquis de las infls. y pedicelos leñosos.
A diferencia de especímenes suramericanos, los costarricenses de esta sp. tienden a poseer láminas foliares subauriculadas en la base; probablemente por esa razón fue descrita Coccoloba bejuco, pero la revisión detallada de recolecciones e imágenes de los tipos no muestra otras diferencias, por lo tanto se sigue aquí el concepto expresado por Melo (2004) manteniendo el último nombre como sinónimo.