Castilleja irasuensis Oerst., en Benth. & Oerst., Vidensk. Meddel. Naturhist. Foren. Kjøbenhavn 1853: 27. 1854. Gallito.
Hierba o sufrútice, 0.2–0.5(–1.6) m, los tallos prominentemente acostillados. Hojas con la lámina a menudo púrpura, 1.5–2.5 cm, angostamente lanceolada a linear, pinnada a (a veces) bipinnadamente lobulada distalmente (con 1–3 lóbulos por lado 0.05–0.8 cm), o (menos frecuente) no lobulada, diminutamente papilado-puberulenta en el haz, puberulenta en el envés. Infls. con las brácteas rojas, oblanceoladas, cortamente lobuladas (las inferiores) o no lobuladas. Fls. con el cáliz rojo (a veces con amarillo en los márgenes), 14–20 mm, la hendidura adaxial 1–4 mm de profundidad, la abaxial 9–15 mm de profundidad; corola 22–30 mm, el tubo 8–12 mm, el labio adaxial 12–19 mm, densamente puberulento a villoso distal y adaxialmente. Frs. 0.7–1.2 cm, elipsoides a ovoide-oblongoides.
Bosque de roble y páramo, 2000–3500 m; vert. Carib. Cord. Central, E Cord. de Talamanca, vert. Pac. y cerca de la División Continental, Cord. de Talamanca. Fl. ene.–abr., jun.–nov. ENDÉMICA. (Víctor Ramírez 494; CR, MO)
Castilleja irasuensis se reconoce por sus tallos prominentemente acostillados, láminas foliares pequeñas, a menudo pinnadamente lobuladas distalmente, con los lóbulos relativamente largos, y fls. con la hendidura abaxial del cáliz mucho más profunda que la adaxial y el tubo de la corola relativamente corto (comparado con el labio adaxial).
Esta sp. es común en suelos de ceniza de los Volcanes Irazú y Turrialba.