Ipomoea tricolor Cav., Icon. 3: 5, t. 208. 1795.
Bejuco; tallos glabros, sin raíces en los nudos. Hojas 4–11 × 3–10 cm, suborbiculares, cordadas en la base, acuminadas en el ápice, no lobuladas, glabras en ambas caras. Infls. de 3–12+ fls.; pedúnculo 3–15 cm, cilíndrico, glabro; brácteas ca. 2 mm, caedizas a subpersistentes. Fls. con los sépalos iguales, 5–6 mm, lanceolados, agudos y no mucronatos en el ápice, glabros, el margen finamente blanco hialino; corola celeste, blanca en el tubo (con la garganta amarilla), 40–60 mm, en forma de embudo, glabra por fuera; estigmas bilobulados. Frs. 1–1.2 cm, obturbinados, glabros; semillas negras, puberulentas.
Bosque húmedo, cult. y ruderal, 1200–1250 m; ambas verts. Valle Central. Fl. ene., nov., dic. Méx.–CR, Col. y Ecua., Bol., Ven., Arg., Antillas Mayores, introd. en el Viejo Mundo. (Q. Jiménez 3533, CR)
Esta sp. se reconoce por sus vistosas corolas celestes, así como por sus sépalos lanceolados con el borde blanco-hialino muy destacado y el nervio medio elevado. En estos y otros caracteres, se parece a una versión grande de Ipomoea aristolochiifolia. También se parece un poco a I. parasitica, la cual tiene tallos muricados y corolas más pequeñas y puberulentas por fuera.
Ipomoea tricolor es frecuentemente cult. como ornamental. Según McDonald (1982), es nativa originalmente de Méx., Centroamérica y N Ven.