Faramea ovalis Standl., Contr. U. S. Natl. Herb. 18: 138. 1916. F. quercetorum Standl.

Arbusto o árbol, 2–8(–12) m, glabro; estípulas brevemente connatas alrededor del tallo, 0.1–0.2 cm, deltadas a redondeadas, acostilladas, con arista 2.5–11 mm, persistentes. Hojas con pecíolo 0.4–1 cm; lámina 4–11 × 1.5–4 cm, elíptico-oblonga, papirácea, con 4–8 nervios secundarios por lado libres o reunidos en un nervio submarginal débil. Infls. terminales y/o axilares, con pedúnculo 0.8–2.2 cm, subumbeliformes, 3–7 × 3–7 cm, de pocas fls. en grupos de 3–5; brácteas hasta ca. 1 mm, deltadas. Fls. con pedicelo 8–18 mm; cáliz con el limbo 1.5–3.5 mm, truncado o (mucho más frecuente) denticulado a dentado, los dientes 0.2–2 mm; corola blanca o violeta a azul, en forma de trompeta a ± de embudo, el tubo 8–13 mm, los lóbulos 5–8 mm. Frs. morados, 0.8–1 × 0.8–1 cm, oblatos a subglobosos, lisos.

Bosque muy húmedo, pluvial, nuboso y de roble, 600–2200 m; ambas verts. Cords. de Guanacaste, de Tilarán y de Talamanca, vert. Pac., Cerro Turrubares. Fl. feb.–jun., oct., dic. CR–Ecua. (G. Herrera & Chacón 2836; CR, MO)

Faramea ovalis, a menudo de bosque nuboso y de roble, se distingue por sus estípulas con una arista bastante larga, persistentes, láminas foliares que tienden a secar grisáceas e infls. subumbeliformes, con fls. en grupos de 3–5. Comúnmente, hay un par de brácteas foliáceas en la base del pedúnculo, sobre un entrenudo corto. Es algo parecida a F. occidentalis (de bosque húmedo y muy húmedo y generalmente de menos elev.), de la cual se distingue por sus láminas foliares más pequeñas, infls. menos floríferas y fls. con el tubo del cáliz generalmente dentado (vs. truncado).