Chamaedorea
Pacaya
Hodel, D. R. 1992. Chamaedorea palms: the species and their cultivation. Int. Palm Soc.
Ca. 95 spp., Méx.–Bol. y Ven., Bras.; 31 spp. en CR.
Plantas dioicas, con tallos erectos, delgados o (rara vez) subarborescentes, solitarios o (C. costaricana) múltiples, inermes, u obsoletos. Hojas con el pecíolo a veces con una conspicua banda o línea amarilla longitudinal abaxialmente, inerme, la vaina partida o cerrada, que a veces (C. costaricana, C. graminifolia) forma (con las vainas de hojas adyacentes) un breve pseudocaule, rara vez (C. costaricana) con estructuras ligulares distales; lámina simple [y bífida en el ápice (en CR)] o pinnadamente compuesta [con los folíolos pocos a numerosos, regularmente espaciados y arreglados en un solo plano (en CR), desiguales o los terminales mucho más anchos, rectos o ± sigmoides], glabra. Infls. inter- o infrafoliares, unisexuales, espigadas (de 1 raquila) a racemosa o subpaniculadamente ramificadas; profilo angostado y bífido en el ápice; pedúnculo que usualmente se vuelve anaranjado a rojo (en fr.), corto a alargado, con 1–varias brácteas alargadas, bífidas en el ápice, persistentes a caducas; ejes usualmente rojos o anaranjados (en fr.), las fls. espiraladamente arregladas (en CR) y (a veces) ± inmersas. Fls. unisexuales, pequeñas, sésiles, ebracteadas; fls. estaminadas con 3 sépalos ± separados y 3 pétalos ± diferenciados a connatos (distal y/o proximalmente); estambres 6; fls. pistiladas con 3 sépalos separados y 3 pétalos usualmente connatos proximalmente; estaminodios ausentes, o dentiformes; pistilo 1; ovario trilocular; estilo corto, o ausente; estigmas 3, recurvados, pequeños. Frs. maduros anaranjados a rojos o (más frecuente) purpúreo oscuro o negros, elipsoides u obovoides a globosos, lisos a verrucoso-equinulados (C. crucensis), con residuo estigmático basal.
Chamaedorea es el único género de palmas en CR que es dioico. Este no es precisamente un carácter de utilidad práctico en el herbario, ni en el campo. La mayoría de las spp. son relativamente poco llamativas, pero usualmente pueden ser reconocidas por la combinación de baja altura (siempre menos de 10 m), tallos solitarios (excepto C. costaricana), verdes e inermes, láminas foliares o folíolos más o menos dentados o serrados y glabros, brácteas pedunculares más o menos numerosas, bífidas en el ápice y papiráceas y fls. ebracteadas. Algunas spp. (especialmente C. tepejilote) tienen una banda amarillenta abaxialmente en los pecíolos y el raquis de las láminas, la cual es diagnóstica, y spp. con láminas pinnadamente compuestas usualmente tienen las pinnas más o menos sigmoides. Típicamente, los ejes de las infrs. llegan a ser anaranjados o rojos. El género más similar y más cercano es Synechanthus (ver); sin embargo, las spp. de Chamaedorea de láminas simples pueden ser confundidas con algunas spp. de Calyptrogyne, Geonoma o Reinhardtia.
Las infls. masculinas y femeninas de una misma sp. de Chamaedorea pueden a veces ser muy diferentes, p.ej., espigadas o con solo dos raquilas vs. multiramificadas. Las infls. masculinas, aunque efímeras y poco recolectadas, generalmente proveen los caracteres diagnósticos más útiles para la identificación de las spp.; sin embargo, sería ideal la información completa. Siempre que se encuentre una planta de Chamaedorea con fls. en el campo, se debe hacer una búsqueda completa para plantas coespecíficas del sexo opuesto, ya que la floración de ambos sexos obviamente está sincronizada para una sp. particular. Aún en botón, las fls. pistiladas en la mayoría de Chamaedorea spp. se distinguen de las fls. estaminadas por la imbricada (a diferencia de valvada) estivación de su corola.
Los países de CR y Pan. comprenden un centro de diversidad para Chamaedorea, el cual es especialmente rico en spp. en los bosques lluviosos de elevaciones medias. Muchas spp. (especialmente aquellas con láminas foliares simples) son ornamentales y asiduamente buscadas por colectores inescrupulosos. Poblaciones silvestres de tales spp. están sitiadas constantemente, y algunas han sido extirpadas. La mayoría de las spp. de Chamaedorea son más o menos raras y locales, lo que exacerba el problema.